LUCK

El canal HBO da a los creadores de series que ampara la suficiente libertad como para que planteen historias que, a priori, pueden resultar complicadas o sencillamente difíciles de entender para un profano en el tema.
Es la sensación que puede tener uno al terminar de ver el primer episodio de Luck. Esta serie creada por David Milch (Deadwood) y producida, entre otros, por Michael Mann, nos mete de lleno en el mundo de las apuestas de carreras de caballos. Pasaremos la mayor parte del episodio dentro del hipódromo y seremos testigos de los chanchullos de un grupo de personajes, pertenecientes a ese mundillo: Chester Bernstein (Dustin Hoffman) que acaba de salir de la cárcel y por lo que extraemos de sus conversaciones con su socio y amigo Gus Demitriou (Dennis Farina), busca vengarse de los que lo encerraron allí; El Viejo (Nick Nolte) propietario de un caballo que demuestra ser un número uno; la pandilla formada por Marcus, Jerry, Renzo y Lonnie, todos unos perdedores que verán como su suerte cambia gracias al talento de uno de ellos.
Todo el metraje del episodio está repleto de jerga técnica bastante incomprensible, pero me da la impresión de que a medida que sigamos viendo más entregas (a partir del 29 de enero) toda esa cháchara va a quedar en segundo plano y nos sumergiremos de lleno en un mundo oscuro, complicada y criminal, como ya desvela el trailer de los próximos episodios.
De vez en cuando, nosotros, los espectadores, debemos hacer un esfuerzo y creo que va a merecer la pena (recordad The Wire o Rubicon, por ejemplo).