MAMÁ

Por causas que desconocemos, Lucas, asesina a su esposa y socio y huye con sus dos hijas pequeñas Victoria y Lilly. Un accidente los dejará abandonados en un bosque helado, donde logran refugiarse en una casa abandonada. Pero una presencia sobrenatural, inquietante y oscura, mata al padre y se hace cargo de las niñas...
Jef (Nikolaj Coster-Waldau, interpretando un doble papel, ya que es el hermano gemelo del desaparecido Lucas) no ha cejado en su intento de encontrar a sus sobrinas y hermano. Cinco años después son recuperadas de la casa, asilvestradas, salvajes. Sólo con la ayuda de un psiquiatra infantil, el Dr. Dreyfuss, lograrán empezar a comprender por todo lo que han pasado las crías, que siempre se refieren a la misteriosa "Mamá".

La pareja de Jef, Anny (Jessica Chastain) es contraria a que las niñas se vayan a vivir con ellos, aunque al final accede. Será entonces cuando la presencia de "Mamá" se haga, poco a poco, más patente. Ruidos, movimientos en las sombras, nanas escalofriantes... Todo esto llevará a Anny, a Dreyfuss y a Jef a querer descubrir quién es el misterioso ente que parece proteger a las niñas.
Cinta producida por Guillermo del Toro, que reune muchos detalles de la iconografía del director: Nanas, la infancia, polillas gigantescas, muñecas hechas con trozos de ramas. El director y coguionista argentino Andrés Muschietti ha sabido fusionar bien su idea, que ya esbozó en el corto del mismo título, con el universo del director mexicano, surgiendo de la mezcla una película escalofriante por momentos, pero con ese toque dramático potente que nos puede recordar a El espinazo del Diablo o El Laberinto del Fauno.
Resultan curiosos dos detalles, el primero es encontrarnos a Jessica Chastain trabajando en una peli de corte fantástico-terrorífico y que es de agradecer en una actriz de tan alto nivel, como ha demostrado en su filmografía. El segundo es que el catalán Javier Botet, al que todos conocemos por haber hecho famosa a la Niña Medeiros en la saga REC interpreta a la inquietante Mamá...