PREDATORS

Después de un laargo verano de decepciones cinematográficas (más o menos esperadas, eso sí...) y de un par de alegrías (léase Toy Story 3 y Origen) nos llega la última versión cinematográfica de los cazadores estelares. Lo bueno que tiene esta película es que no pretende ser más de lo que es, un divertimento. Un crítico bastante corto de miras decía hoy en el periódico que aquello parecía el típico chiste de "y van un inglés, un francés y un español..." pero este serio sentenciador no se da cuenta de que ésta no es una película de Fellini, macho.
Un grupo de soldados, mercenarios y asesinos varios van a parar a un selvático planeta, coto de caza de la más letal de las especies (con el permiso de los aliens...) y tendrán que tratar de sobrevivir en este infierno: Serán acosados por "perros" de presa, el inhóspito entorno y por ellos mismos, ya que entre sus filas hay algún personaje que no es lo que parece...
Robert Rodriguez toma le relevo en la producción y coloca al interesante Nimrod Antal (Habitación perdida, Blindado) y como buen friki que es nos ofrece una historia que le debe mucho a los comics, con referencias a la primera Predator y con un ritmo trepidante y sobre todo situaciones límite que nos lo hacen pasar bien en la butaca, que no es poco. Hace poco comentaba con un amigo que está la cosa tan mala en los cines que lo menos que se le puede pedir a una peli de hoy en día es que, al menos, sea distraída...)
Plagada de rostros conocidos del cine y la tele veremos como los protas son masacrados por tres predators... Y es que ahí está el único pero: En el trailer se nos muestra a un Adrien Brody marcado por varios laseres de los predators, cuando sólo hay tres cazando (bueno, esto no es del todo verdad, pero no quiero desvelaros el spoiler...). De todas maneras, el zumbado personaje que interpreta Lawrence Fishburne lo explica en la peli, así que al menos se han cubierto las espaldas.
Atentos a la cojonuda escena entre el yakuza y un predator. Samurai total!