MAN OF STEEL

En lo que respecta a las adaptaciones cinematográficas de personajes de cómic, es difícil, por no decir imposible, contentar a todo el mundo. El principal problema, a mi parecer, es que la mayoría espera que se adapte tal o cual saga o arco argumental, cuando el objetivo principal a cumplir por este tipo de films es respetar al personaje, por lo demás, pueden hacer lo que quieran (un buen ejemplo sería la trilogía del Batman de Nolan)
La película va a saco y en el prólogo nos traslada a Krypton, narrando en pocos minutos el nacimiento de Kal El, la rebelión de Zod y la destrucción del planeta. Todo está mostrado con un ritmo perfecto y un diseño de producción modélico. Parece que lo hemos visto todo en la pantalla, pero no, aún se nos puede asombrar, no hay más que ver los diseños de las naves, los edificios...
Es un acierto que la historia de Clark Kent esté narrada a base de flasbacks, saltos temporales que nos dan una perspectiva de la vida, la infancia y juventud del alienígena. Destacaría la dramática escena de la muerte de Pa Kent (Kevin Costner) y la relación tan natural y creíble de Clark con su madre terráquea (Diane Lane).
Para todo este primer "bloque" el director Zach Snyder ha elegido un estilo "naturalista", cercano a las últimas películas de Terrence Malick. Se nos presenta primero a este personaje, su vagar por el mundo, sin saber bien quién es y por qué tiene estos poderes.
La llegada del General Zod lo acelera todo. Éste es un villano, digamos, con "buenas" intenciones. pretende recuperar, reconstruir Krypton en nuestro planeta. Lo malo es que para ello deberá aniquilar a la especie humana, terraformando el planeta... Michael Shannon está perfecto, creando un retrato que se aleja del mero villano desquiciado. Eso sí, pienso que el doblaje no ayuda demasiado, espero escuchar su voz en V.O.
Tenías mis dudas sobre Amy Adams, pero en cuanto aparece, nos damos cuenta de que ella es Lois Lane, al aguerrida periodista, ganadora de un Pulitzer. Y la química que existe entre ella y Superman (Henry Cavill) es perfecta.
Y qué decir de Cavill. Es Superman, no hay que darle más vueltas. Sosegado, tranquilo en momentos y furioso en otros. Es la encarnación ideal del héroe para estos tiempos.
El segundo bloque, el de las tortas, es a mi parecer, el que se hace un poco más largo. Para mi gusto, hay demasiadas peleas y demasiado continuadas, aunque no por ellos dejen de ser espectaculares. Ahora sí, este es el Hombre de Acero repartiendo leña y recibiéndola. Snyder ha abandonado las cámaras lentas y se decanta por una acción que, a veces, puede resultar algo confusa.
Sobre la controversia de la escena del final. Bueno, lo dicho, ésta es una visión del personaje moderna, los tiempos han cambiado y Superman no puede seguir siendo el boy scout de siempre (además de ser una escena con una lógica aplastante, que refuta todo loq ue hemos visto anteriormente). Además, me parece junto a la escena de la muerte de Pa Kent, el otro momento dramático álgido de la película.
No me parece que esta película sea una obra maestra, pero creo que es una buena aproximación y actualización del personaje. ¿Más oscuro? tal vez. ¿Han eliminado o faltan cosas? Puede ser... pero éste es sólo el principio del camino. Las grandes sagas se van construyendo película a película y pienso que ha tenido un inmejorable punto de partida.

ORPHAN BLACK

Sarah (Tatiana Maslany) regresa a su ciudad después de un año de "huida" de su existencia anterior, donde dejó atrás a su hija pequeña. La vuelta va a ser traumática, ya que mientras espera en una estación de Metro, es testigo del suicidio de una chica idéntica a ella. Tras robarle el bolso se inicia una historia que es lo más parecido a una montaña rusa para la protagonista. Adoptará la personalidad de la chica muerta e irá improvisando a medida que le surgen los problemas, que no serán pocos. Perseguida por su ex novio, un camello bastante violento, buscará ayuda en su compañero de casa de acogida y medio hermano Felix, un chico gay que pone la nota de humor en la serie.
Pero el misterio rodea a la vida de la chica muerta y Sarah, sin saberlo aún, es un peón muy importante en este juego.
En estos momentos estamos algo necesitados de buenas historias de ciencia ficción en al pequeña pantalla, y ésta promete. Poco a poco iremos descubriendo capas de este misterio y por qué la chica se va encontrado con copias idénticas de ella...
Cabe destacar la labor camaleónica de la protagonista, que sabe meterse en la piel de diferentes personajes en esta coproducción de la BBC norteamericana y una productora canadiense, escenario donde se desarrolla la trama.

RAY DONOVAN

Si hubiera que puntuar a una serie por la calidad de su episodio piloto, el de esta nueva producción creada y escrita por Ann Biderman (Southland) obtendría una nota muy alta, no me atrevería a ponerle un diez, pero casi.
Ray (Liev Schreiber) es un fixer, un "arreglador" en Hollywood. Posee los contactos y el equipo necesarios para limpiar la imagen de cualquier cliente. Por ejemplo, con tres llamadas telefónicas soluciona un terrible problema con el que se despierta un millonario jugador de basket y a la vez resuelve cualquier duda sobre la sexualidad del actor de moda.
El problema es que, tal como dice el refrán "En casa del herrero, cuchara de palo" y la vida de Ray es bastante turbulenta: Tiene dos hermanos, uno alcohólico y drogadicto, que fue víctima de una violación cuando era pequeño; El otro padece una grave lesión; su padre (Jon Voigh) es un bastardo sin corazón que, para colmo de males, acaba de salir de la cárcel y por si todo esto fuera poco (que no lo es...) su relación con su mujer e hijos no es todo lo buena que debiera por culpa del trabajo y las "tentaciones" a las que se enfrenta.
Pues bien, en un sólo episodio vemos a Ray en acción (atención a las dos alternativas que le da al acosador)
, conocemos a su familia y se plantea el gran problema que va amargarle al existencia. Y todo ello con un ritmo perfecto y haciendo un retrato de todos y cada uno de los personajes (que son muchos) que aparecen en la trama.
Me atrevería a decir que estamos ante una muy buena serie. El tiempo y las audiencias lo dirán.

PORQUE MOLA...

Ilustración de cartel realizada por Tony Moore para la película V/H/S 2

BEHIND THE CANDELABRA

Steven Soderbergh dirige para el canal norteamericano HBO la adaptación a telefilme del libro escrito por Scott Thorson. En él se narra la larga relación que mantuvo éste con el curioso pianista Liberace. Y me quedo corto al definirlo como "curioso": Walter Liberace (Michael Douglas) fue durante muchos años la imagen del kitsch en el mundo. Se hizo famoso protagonizando su propio programa en la televisión y luego se instaló permanentemente en Las Vegas, donde ofrecía diariamente su espectáculo lleno de brillos y barroquismos a un público entusiasta.
El joven Scott (Matt Damon) y él se conocen en los 70 y rápidamente surge la llama del amor, una relación apasionada y desbordada que llevará al pianista a prácticamente "adoptar" al joven que sólo quería estudiar veterinaria. Anillos de oro, pulseras y demás joyas, trajes horteras hasta la arcada y ríos de champán ocupan la vida de la pareja durante mucho tiempo. Pero nada dura para siempre y el carácter díscolo y absorbente del artista transforman la vida de Scott en un infierno en el que pierde su rostro por las operaciones de cirugía plástica y se convierte en un adicto a las pastillas primero y a la cocaína más tarde.
Es verdad que la realidad supera a la ficción y esta historia es el ejemplo más claro, los momentos más alucinantes no son exagerados por el director, y es que la vida de Liberace y él mismo eran así de extremos (las tragaperras instaladas en casa de su madre, el eterno desfile de jóvenes efebos...)
Cabe destacar el trabajo de Oscar que realiza Michael Douglas en su regreso después de haber padecido una terrible enfermedad y la divertida interpretación de Rob Lowe como el cínico cirujano plástico.

THE PACT

La madre de Nichole y Annie acaba de fallecer y la hermana mayor regresa a la casa familiar para arreglar algunos asuntos. Annie, la hermana pequeña es una rebelde que se niega a volver a esa casa en la que fue víctima de maltrato, pero cuando su hermana y su prima desaparecen misteriosamente no tiene más remedio que enfrentarse a sus fantasmas personales. Al principio la policía del lugar la señala como principal sospechosa, pero el detective Bill Creek cree su versión de los hechos y juntos comienzan una investigación que los va a llevar a un lugar oscuro, desconocido dentro de la misma casa.
Con la ayuda de una médium, Stevie, Annie podrá contactar con el Más Allá y empezar a obtener respuestas, pero algunas no le van a gustar lo más mínimo y harán que el terror se desencadene a su alrededor.
Tal vez penséis que el argumento de esta cinta está algo trillado, para nada, ya que le da una vuelta de tuerca al tema de las venganzas ultraterrenas, además de mezclarla con los psicópatas. Además, es curioso comprobar el poco diálogo que tiene la película, convirtiéndose en una experiencia visual potente.

THE CALL

Jordan (Halle Berry) es una experta miembro del servicio de 911 (Urgencias), siempre mantiene una actitud distante con la gente que llama pidiendo ayuda de cualquier tipo. Pero un día deberá lidiar con el secuestro de una joven y un error de la operadora hará que la chica sea descubierta y asesinada por su atacante.
Jordan cae víctima de una depresión, dejando su puesto y dedicándose a la instrucción de nuevos empleados. Sólo una nueva llamada de otra chica secuestrada la hará regresar al teléfono y se iniciará un juego del ratón y el gato con el asesino, en el que una de las principales piezas, la chica, deberá demostrar su dureza, ya que la situación no pinta nada bien para ella.
Hay películas como ésta, tremendamente distraídas, con una duración estándar de 90 minutos, que son perfectas para evadirnos un rato, sin más complicaciones. Curiosamente está dirigida por Brad Anderson, el que fuera una de las jóvenes estrellas del nuevo género de terror (Session 9, El Maquinista, Transsiberian...) y que se dedica últimamente a la realización de series de televisión (Rubico, Treme, Fringe, Boardwalk Empire...) y alguna que otra película, como ésta misma o la anterior Vanishing on 7th Street, que es probable que pasen sin pena ni gloria. Una lástima.
Curioso el papelito de Michael Imperioli (Los Soprano), no os digo más...

V/H/S 2

Una pareja de detectives encargados de buscar a un chico desaparecido terminan en la misteriosa casa de la primera parte, donde en todas las habitaciones hay montañas de cintas de video vhs. Mientras uno de ellos explora el piso, otro visiona varias cintas y un mensaje dejado en un portátil por el chico. En poco tiempo comprenderán en horror en el que se han visto envueltos.
Los diferentes segmentos están dirigidos por realizados que destacan en el género terrorífico, a excepción de Gareth Evans, que ha revolucionado el género de las artes marciales con su The Raid. El resto son Simon Barrett, que escribió uno de los segmentos en la anterior entrega; Jason Eisener, director Hobo with a shotgun; Gregg Hale y Eduardo Sánchez, productor y director de El proyecto de la bruja de Blair, respectivamente; Timo Tjahjanto  (The ABC of Death) y Adam Wingard (A horrible way to die, V/H/S/, The ABC of Death).
Como en la primera cinta, seremos testigos (utilizando el recurso del found footage) junto a los protagonistas de terribles y horripilantes historias que mezclan zombies, un perrete superviviente,
extraterrestres abductores y el Apocalipsis dentro de una secta con un líder de lo más curioso...
Abstenerse estómagos débiles e impresionables.

BIENVENIDOS AL PASEO MARÍTIMO!

SÍ... VUELVE... PREPARÁOS!!

LAS MEJORES NOTICIAS...

SOUTHLAND

Cuando eres aficionado al género policiaco y un guionista de la talla de Ed Brubaker te recomienda una serie, no tienes más remedio (y deber) que verla.
Heredera de clásicos catódicos como Canción triste de Hill Streel o Policías de nueva York, su creadora, Ann Biderman, actualiza la historia de este grupo de policías de Los Angeles, su devenir diario, sus historias personales y la violenta jungla en la que tiene que meterse día tras día.
El agente Cooper es el profesional, lleva muchos años patrullando y poco le sorprende ya de lo que se encuentra en las calles.
Sammy Bryant es un inspector, casado con una chica obsesionada por mantener a un antiguo perro policía que los trae de cabeza.
Lydia Adams es otra inspectora de color que no puede evitar en muchas ocasiones empatizar con las víctimas de los crímenes.
Sherman es un novato, un rookie que deberá demostrar su valía ante el escéptico Cooper.
Dudek es otro agente, pero esta vez es el lado más impresentable de la placa, ya que siempre está metido en problemas y sus compañeros le tienen que salvar el culo.
Y así, iremos conociendo, episodio tras episodio a los miembros de esta comisaria, cada uno con una historia personal propia, la mayoría de las veces dramática y cuyo trabajo afecta a lo que les queda de vida.
Ann Biderman, guionista y creadora de la serie, también participa en los créditos Ray Donovan, uno de los nuevos títulos de la próxima temporada.

UFF, HA TARDADO. PERO REGRESA EN JULIO...

STOKER

Éste es el apellido de una familia formada por Evelyn (Nicole Kidman), la madre; India (Mia Wasikowska), la hija y el padre recién fallecido en un accidente de coche, Richard (Dermot Mulroney).
India, que acaba de cumplir los dieciocho, no reacciona bien ante la pérdida de su padre y se encierra en su mundo, leyendo libros de normas ante los funerales y rodeándose de las cajas con los idénticos zapatos que Richard le regalaba todos los años.
Su madre es una mujer atractiva y se siente muy atraída por la inesperada visita del hermano menor de Richard, Charles (Mathew Goode) un tipo que cuenta infinidad de anécdotas sobre sus viajes alrededor del mundo. La presencia de su tío hace que la chica fije su atención en él, ya que hay algo que la perturba, parece como si entre los dos existiera un vínculo invisible, más allá del meramente sanguíneo.
Poco a poco, la chica irá descubriendo pequeños detalles, objetos que la guiarán por un camino sin retorno, que la cambiará para siempre, floreciendo una personalidad hasta ahora oculta.
Hay muchos directores orientales que a la hora de dar el salto al mercado USA pierden su fuerza, su identidad. No es el caso de Park Chan-wook (Trilogía de la venganza- Simpathy for Mr-Mrs Vengeance, Oldboy...) ya que mantiene un estilo visual propio, hipnótico en algunos momentos y sin el cual, esta película perdería toda su fuerza.
Como dato curioso, decir que el guión viene firmado por Wentworth Miller, el hermano bueno (y tatuado) de la serie Prison Break.

THE LAST EXORCISM PART 2

Nell (Ashley Bell), la joven poseída en la primera parte, es la (aparente) única superviviente de los terribles hechos acaecidos. No se sabe cómo pudo escapar al aquelarre que se celebró en los terrenos cercanos a su casa, donde fueron asesinados su padre Louis y el falso predicador y exorcista Cotton Marcus.
La chica es trasladada a una casa de acogida en New Orleans y comparte sus primeros días de "normalidad" junto a un grupo de chicas descarriadas. Poco a poco va recuperando la tranquilidad y dejando atrás las pesadillas y recuerdos, hasta se enamora de un joven.
Lo malo es que cuando El Diablo elige a una víctima, raramente la olvida y el horror regresa a la vida de la muchacha: Visiones, extraños mensajes y una maléfica presencia que se instala en la casa. Nell es un pobre peón en medio de un juego en el que se mueven muchas fichas, buscando el Apocalipsis.
Película de terror distraída y en la que se agradece que la hayan realizado de una manera clásica, dejando atrás el ya cansino y manido found footage y con un final nada complaciente y oscuro, muy oscuro.

THE FALL

Esta nueva serie británica de la BBC tiene dos protagonistas, por un lado la inspectora Stella Gibson (Gillian Anderson): fría, profesional, resolutiva. Su presencia es requerida en Belfast debido al hallazgo del cuerpo sin vida de una joven. Todas las pistas indican que ha habido un ritual en el crimen, por lo que podría tratarse de la obra de un psicópata. Hecho que se confirma cuando Gibson lo relaciona con otro crimen, en este caso el de la ex pareja del hijo de Morgan Monroe, un millonario.
El otro protagonista es Paul Spector (Jamie Dornan), un joven padre de familia y psicólogo. Podíamos decir que tiene una vida perfecta, quiere a su esposa y a sus dos hijos. Pero oculta un terrible secreto, él es el asesino de las jóvenes. Spector es un depredador que sigue a su presa, se introduce en su casa y prepara el escenario del que será su crimen. Su buena forma física hace que se cuele por los huecos más inesperados y tras una fachada de timidez se esconde un obsesivo enfermo que cada vez espacia menos sus crímenes.
Las vidas de la policía y el asesino se nos muestran de una forma paralela, aséptica, sin que se juzgue a ninguno de los dos. Él es un enfermo, un criminal y ella es una persona distante, gélida y que sólo se acerca a los demás cuando lo necesita (como en su fugaz relación sexual con el joven agente Olson).
¿Qué ocurrirá cuando estas dos existencias se crucen? En algún momento el cerco tendrá que estrecharse...
Interesante propuesta, creada y escrita por Allan Cubitt, que posee una larguísima trayectoria como guionista de series y películas.